Este 16 de marzo, cuando se cumplen 26 años de la muerte del doctor Humberto Fernández Morán, los venezolanos celebran el traslado de sus restos al Panteón Nacional, en Caracas.
Conocido por su invención del bisturí de diamante y su trascendental aporte a la biología molecular, el Dr. Fernández Morán también fue clave en el estudio de las rocas lunares traídas por la misión Apolo 11.
Su legado, sin embargo, va más allá de sus logros científicos; es un símbolo del talento y la grandeza del pueblo venezolano.
Giselle Montiel Fernández, familiar del doctor, expresó con orgullo: “Para mí es un honor inmenso, un orgullo que por estas venas corra un poco de la sangre de ese ser tan especial (…) y está donde ha tenido que estar hace mucho, en el panteón nacional, al lado de Simón Bolívar”.
Este sentimiento de orgullo fue compartido por muchos, como Diana Carolina Torrealba, quien recordó la inteligencia y el patriotismo del Dr. Fernández Morán: “Era un hombre profundamente patriota, pero más aún, un hombre profundamente inteligente, y esa inteligencia se la atribuía al ser venezolano, al ser patriota, al ser combativo, al ser lo que somos nosotros; un pueblo noble, un pueblo bello, y un pueblo sumamente inteligente e innovador.
El diputado Enrique Ramos, resaltó el valor de su aporte a la ciencia y la salud: “Un hombre que dedicó su inventiva a poder llevar o dar a conocer la cuchilla de diamante, para la ciencia, para la salud, para salvar vidas”.
El acto fue impulsado por el presidente Nicolás Maduro, quien solicitó formalmente el traslado del científico a este espacio simbólico, cumpliendo con los procedimientos legales y culturales necesarios para rendir homenaje al zuliano.
