Más de un millar de venezolanos vivieron el miércoles algunos de los mitos y leyendas locales a través de la denominada «Ruta del Terror», un recorrido lleno de espantos y personajes de cuentos que se llevó a cabo en un sector histórico de Caracas próximo al barrio de Petare, considerada la favela más grande del país.
Este recorrido está diseñado para quienes se atreven a mirar de frente a lo desconocido. Una vez crucemos el punto de partida, no habrá vuelta atrás», escucharon los asistentes al comienzo de la ruta que, según los organizadores, tiene el objetivo de resaltar parte de la cultura del Casco Histórico de Petare.
Desde techos, ventanas, calles, callejones y un cementerio recreado en una plazoleta, salieron, a medida que avanzaban los participantes, una treintena de actores que representaron personajes como el Yerbatero, quien solía vender las hierbas que recolectaba en la principal formación montañosa de Caracas, conocida como el Ávila, o el Descabezado, un alma errante, así como espíritus de esclavos.
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«Tenemos en cada esquina un mito que contar», dijo a Efe Kristhian Polo, miembro del equipo creativo de la Fundación José Ángel Lamas, la responsable de la ruta, que busca «cuidar lo cultural y lo patrimonial del municipio Sucre», al que pertenece Petare.

Afirmó que se trata de un trabajo «arduo» que llevan a cabo casi 70 personas, entre actores de 7 a 60 años de edad, maquilladores, cocineros, ingenieros de sonido y encargados de efectos especiales, entre otros.
La Ruta del Terror en Petare
María Eugenia Rangel, integrante de la fundación, indicó que esta actividad está basada, principalmente, en «espantos y aparecidos de la zona del centro histórico de Petare».
«Hay muchas personas que dicen escuchar espantos, ánimas, esclavos que en algún momento vivieron en esta zona, y nosotros lo que hacemos es recrearlo, (…) contar a las personas las historias de esta localidad», explicó a Efe.
La ruta no está recomendada para menores de 12 años de edad ni para personas con discapacidad, advierte el narrador que da la bienvenida al trayecto, que prevén repetir en agosto.