Venezuela expresó su más enérgico rechazo a los recientes bombardeos perpetrados por Estados Unidos y Reino Unido en Yemen, calificando estas acciones como una violación flagrante del Derecho Internacional y una amenaza directa a la soberanía de este país.
En un comunicado oficial, el canciller Yván Gil denunció que estos ataques agravan la ya crítica situación humanitaria en Yemen y profundizan la desestabilización en toda la región.
El gobierno venezolano vinculó la crisis actual a décadas de ocupación y violencia contra Palestina, señalando que las milicias yemeníes defienden una causa legítima contra los abusos cometidos por Israel. «Casi 80 años de agresión han generado un conflicto prolongado cuyas consecuencias afectan a toda Asia Occidental», afirmó el comunicado.
Venezuela instó al cese inmediato de las hostilidades y exhortó a la comunidad internacional a tomar medidas urgentes para frenar esta nueva escalada militar. Asimismo, reiteró su compromiso con la paz, el respeto a la Carta de las Naciones Unidas y el cumplimiento de las resoluciones del Consejo de Seguridad sobre Palestina.
El pronunciamiento concluyó reafirmando la vocación pacifista de Venezuela y su defensa inquebrantable de la soberanía de los pueblos frente a las intervenciones extranjeras.
