Un recurso para retirar la nacionalidad de Leopoldo López, fue presentado por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ante el Tribunal Supremo de Justicia del país.
La decisión se ampara en el artículo 130 de la Constitución, y en la Ley Orgánica Libertador Simón Bolívar.
El comunicado justifica esta acción, en razón de su «grotesco, criminal e ilegal llamado a la invasión militar de Venezuela, la promoción permanente del bloqueo económico, así como el llamado a asesinar masivamente a los venezolanos, en complicidad con gobiernos y enemigos extranjeros”, dice el comunicado.
Tras la decisión, la Cancillería Venezolana y el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME) iniciarán los procesos correspondientes para anular el pasaporte de López y retirar oficialmente su nacionalidad.
El Gobierno venezolano también aseguró que cuenta con “todos los recursos para garantizar la integridad territorial y la soberanía del país frente a poderes extranjeros y a quienes intenten atentar contra la independencia nacional”.
Leopoldo Lopez y sus pedidos de invasión
La acción contra Leopoldo López se produce luego de que el opositor y prófugo de la justicia respaldara, una vez más, una potencial intervención militar de Estados Unidos contra Venezuela, al asegurar desde Madrid que la presión de Washington es la única vía para provocar un «cambio de régimen».
En una entrevista concedida a la agencia española EFE este jueves 23 de octubre, López contestó afirmativamente al ser preguntado si vería con buenos ojos un ataque estadounidense en suelo venezolano.
El político de extrema derecha aseguró que la presión ejercida por Washington no debería limitarse a las operaciones marítimas en el Caribe, que ya han dejado al menos 30 personas asesinadas:
“Creo que es correcto que no solamente se haga esa presión en mar, como ya ha sucedido con varias embarcaciones, sino que eso pueda avanzar a objetivos dentro del territorio nacional”
declaró Leopoldo López.

Estas declaraciones se alinean con las esgrimidas el pasado 20 de septiembre, cuando volvió a solicitar abiertamente una intervención militar por parte del gobierno de los Estados Unidos contra Venezuela.
López justificó como «absolutamente legítimo» un escenario de agresión foránea contra Venezuela, utilizando como pretexto la narrativa fabricada por Washington de supuesto combate al narcotráfico.
Al preguntársele directamente si apoyaría una invasión militar a su propio país, respondió con un contundente «sí».
«Alerta roja» contra el opositor Leopoldo López
Desde enero de este año, el fiscal general venezolano, Tarek William Saab, solicitó a la Interpol una notificación roja para la detención del opositor Leopoldo López exiliado desde hace varios años en Madrid por «instigar a acciones armadas contra la República».
El funcionario también añadió que la solicitud se producía por «traición a la patria, conspiración y asociación». La decisión de Venezuela llega después que López se mostrara de acuerdo con un mensaje del expresidente de Colombia, Álvaro Uribe, quien pidió al mundo una intervención militar para frenar las aspiraciones de Maduro de perpetuarse en el poder sin respetar la democracia.
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El 24 de octubre de 2020, el líder opositor venezolano Leopoldo López abandonó la residencia del embajador de España en Caracas, donde se encontraba refugiado desde abril de 2019, y salió de Venezuela de forma clandestina. A través de una ruta no revelada, se dirigió a Colombia y desde allí viajó a Madrid, España, donde se reencontró con su familia.
López se refugió en la residencia del embajador español tras la fracasada sublevación militar del 30 de abril de 2019 contra el gobierno de Nicolás Maduro, en la cual participó tras ser liberado del arresto domiciliario.
Leopoldo López salió de Venezuela de forma clandestina, cruzando la frontera hacia Colombia.
¿Quién ayudó a Leopoldo López a escapar de la embajada española?
Aunque el gobierno español confirmó que López salió de la embajada voluntariamente, no se aclararon de inmediato las circunstancias de cómo burló los controles de seguridad venezolanos para salir del país.
Un libro publicado en 2023 reveló que, según el autor Javier Moro, fue Sara de la Lastra Bécker, la esposa del embajador español, quien ayudó a López a salir escondido en el maletero de su coche.

En el texto se describe cómo la documentación falsa de López ya estaba preparada. Salió del país con el nombre de Eduardo Galleti, cédula de identidad 13833928, nacido el 19 de agosto de 1982, abogado y casado. Se construyó una identidad falsa que incluía profesión y vínculos familiares.
Consecuencias
La salida de López causó un incidente diplomático entre Venezuela y España. El gobierno de Nicolás Maduro acusó a España de complicidad en la «fuga ilegal de un delincuente».
España respondió condenando la detención y allanamiento de las viviendas de trabajadores de su embajada por parte de las autoridades venezolanas.
La relación del embajador con el gobierno venezolano siempre fue problemática. Vale acotar que el 25 de enero de 2018 fue declarado persona non grata y se retiró del país. Retornó a Caracas en abril de ese año y el 30 de abril de 2019 fue cuando acogió en la Residencia de la embajada en calidad de «huésped» a Leopoldo López.
Tras su llegada a España, López anunció que continuaría trabajando desde Madrid para lograr la «libertad de Venezuela». Su partida fue vista de manera diferente por la oposición venezolana: algunos mostraron alivio por su libertad, mientras que otros se mostraron apáticos sobre su impacto político.
Leopoldo prófugo de la justicia
Leopoldo López había sido arrestado en 2014 y sentenciado a 14 años de cárcel, durante marchas en clave destituyente del sector de la derecha cuya consigna central era “calle hasta que caiga” a menos de dos años de haber asumido Maduro, en momentos en que Leopoldo López, Antonio Ledezma y María Corina Machado venían actuando coordinadamente.

Tres años y medio estuvo en la prisión de Ramo Verde, y luego 21 meses en su residencia, bajo arresto domiciliario, vía acuerdo y negociaciones en el que estuvo involucrado el ex presidente español Rodríguez Zapatero (una noticia que fue dada a conocer primero desde el Estado Español, a través de un twitter de Mario Rajoy, y no por el Gobierno de Maduro).
Fue desde el allí, y tras el fallido golpe de Estado del 30 de abril, momento en que fue liberado con la ayuda del jefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), Christopher Figuera, que participara de la asonada, pero al no poder concretarse el golpe se refugia en la embajada del Estado Español luego de pasar primero por la embajada chilena.
Leopoldo López ratifica su apoyo a una intervención militar extranjera
El activista de la extrema derecha y prófugo de la justicia venezolana, Leopoldo López, ratificó su apoyo a una intervención militar extranjera en su propio país, al tiempo que se jactó de promover un fallido golpe de Estado contra el presidente Nicolás Maduro, el 30 de abril de 2019.
«Yo no sólo creo que hay que buscar el apoyo de los militares, sino que tenemos, considerar, incluso, alternativas en el uso de la fuerza (…) Yo sí creo que hay que evaluar todas las opciones. Guaidó sí le planteó directamente a Trump (primer mandato) todas las iniciativas», dijo en una declaración divulgada en redes sociales.

Las autoridades de Venezuela han denunciado que López y Guaidó han participado en golpes de Estado y planes de desestabilización contra el país Venezuela.

