«Cuando tratan de imponer por la fuerza la hegemonía de un solo imperio: el imperio de los Estados Unidos, los países de América Latina, entre ellos, Venezuela, se preparan para enfrentar la amenaza geopolítica neo imperial«, expresó el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro durante el encuentro con los candidatos y candidatas del Gran Polo Patriótico Simón Bolívar, en el Cuartel de la Montaña 4-F.
Días previos, la vicepresidenta Delcy Rodríguez informó que, en razón de la guerra económica iniciada por Donald Trump en contra de las petroleras, Chevron devolvió cargamentos de crudo a Pdvsa, ante la imposibilidad y restricciones que le han sido impuestas de pagar por ellos a Venezuela.
Rodríguez, indicó que «este crudo está siendo comercializado en los mercados internacionales». y que Pdvsa respetará los términos y obligaciones contractuales acordados con las trasnacionales. «En Venezuela hay leyes y se respetan», dijo la vicepresidenta.
La también titular del Ministerio de Hidrocarburos de Venezuela, destacó que «Estados Unidos no impedirá que nuestro país trabaje y avance!».
Chevron, una de las mayores empresas petroleras estadounidenses, recibió la orden de devolver casi un millón de barriles de crudo venezolano a Petróleos de Venezuela S.A. (Pdvsa), la compañía estatal venezolana.
El inquilino de la Casa Blanca podría tener, entre ceja y ceja, una reducción de la demanda de crudo mundial. Trump ha sido el actor explosivo en las últimas semanas. Uno de los potenciales efectos colaterales de la dura guerra comercial de imposición de aranceles que lleva a cabo el inquilino de la Casa Blanca podría ser una reducción de la demanda petrolera mundial.
De allí, la naturaleza de esta orden ejecutiva de la administración estadounidense que endurece las sanciones petroleras contra Venezuela e impone también, sanciones secundarias a los compradores de crudo venezolano.
La magnitud y robustez del aparato económico venezolano y también la posición geoenergética global no le detiene el pulso a Venezuela que sigue haciendo despachos de crudo bajo licencias que están saliendo con normalidad.
Pero, en EEUU el panorama es completamente diferente. Los inventarios de crudo comercial, reportados por la EIA, muestran una caída de 3,3 millones de barriles, a pesar de un incremento en las importaciones de más de 5 millones de barriles de crudo.
Los inventarios de destilado y gasolina también mostraron un leve declive.