La reapertura del espacio aéreo entre Panamá y Venezuela ha sido recibida con optimismo por parte del sector aeronáutico y autoridades de ambos países, marcando un posible avance hacia la normalización de las relaciones bilaterales, interrumpidas desde julio de 2024.
Marisela De Loaiza, presidenta de la Asociación de Aerolíneas Venezolanas (ALAV), expresó su satisfacción ante la reanudación de operaciones, destacando que las aerolíneas comenzarán a restablecer sus frecuencias de forma progresiva.
En ese sentido, la compañía Copa Airlines anunció que ofrecerá un vuelo diario entre ambos países a partir del 3 de junio, con planes de aumentar a dos vuelos diarios a partir del 10 de junio.
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, también celebró la medida, subrayando que facilitará el intercambio comercial y contribuirá al fortalecimiento de los vínculos entre las dos naciones.
La suspensión de los vuelos, que entró en vigor en julio de 2024, se dio en un contexto de tensiones diplomáticas posteriores a las elecciones presidenciales venezolanas y a la ruptura de relaciones oficiales entre Caracas y Ciudad de Panamá. La reanudación del tráfico aéreo directo es vista como un primer paso hacia la distensión entre ambos gobiernos.
