El streamer francés Jean Pormanove, cuyo nombre real era Raphaël Graven de 46 años, murió en Niza entre el 17 y el 18 de agosto durante una retransmisión en Kick de casi 12 días, que constaba de un «desafío» para impedir que se durmiera, explica France 24.
Pormanove era conocido por soportar regularmente escenas impactantes de supuesta humillación y abuso a manos de otros streamers, cuyos abogados han señalado que los incidentes estuvieron debidamente guionados o eran consentidos.
Igualmente, las autoridades judiciales de Francia informaron que Pormanove no falleció como resultado de un trauma ni de la intervención de un tercero. La autopsia no mostró rastros de lesiones traumáticas que pudieran explicar la muerte, y que las causas probables parecen ser de origen médico o toxicológico.
Se han ordenado análisis adicionales para determinar las causas, señalando que Graven tenía problemas cardíacos y estaba recibiendo tratamiento médico para la glándula tiroides.
Francia demandara a Kick
De acuerdo a medios europeos, el Gobierno francés demandará a la plataforma australiana Kick por su presunta negligencia en la muerte del streamer galo. Esta nueva investigación se abrió para determinar si Kick difundió «a sabiendas videos de atentados voluntarios contra la integridad de una persona», anunció el martes la fiscal Laure Beccuau en un comunicado.
Los investigadores también tratarán de determinar si la plataforma australiana cumple con la normativa europea sobre servicios digitales (DSA). Los responsables se enfrentan a una pena de 10 años de cárcel y una multa de 1 millón de euros (1,16 millones de dólares).